13.10.13

TODO LO QUE QUEDA



No hay más grito contenido
para confeccionar este poema,
que un hilar de sombras,
 nostalgias,
y un enjambre de palabras marchitas
ocultando el alarido quedo.

El humo de unos pasos en el aire,
como  efímero recuerdo,
surcos de lágrimas amargas,
como muescas esculpidas en su honor.

Este saber respuestas
 a costa de mil heridas,
este bordar palabras en mi mortaja,
este caminar a tientas
 para no caer y lacerarse el alma,
este mirar las horas desde dentro,
para seguir sintiendo,
este llorar callado,
 mecido por embates de silencio.

Socavé todas las primaveras
para caer en este instante
perdiendo el límite de cada ola,
desviví para renacer sin pautas,
rectificando rutas
 para seguir la huella,
que un devenir postrero
en surcos,

manifestará en mi palma.

2 comentarios:

  1. Bonitos versos que me recuerdan un tanto a los de tu poeta preferido: Luis Rosales.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Gracias Rafael.
    Que mas quisiera parecerme siquiera en sus comas. Bebo en sus aguas, ojala se pegue algo. Besos

    ResponderEliminar

Gracias por tu comentario